Ulysses Navarro, un joven de 20 años, está decidido a dejar su huella en el mundo del boxeo. Con dos victorias por nocaut en sus primeras peleas como profesional, Navarro ha demostrado que tiene lo necesario para destacar en el cuadrilátero. Sin embargo, su camino hacia el éxito no ha sido fácil. A pesar de sus aspiraciones y deseos de dedicarse completamente al boxeo, Ulysses enfrenta la realidad de tener que trabajar en un supermercado para ganarse la vida.
En su trabajo, Navarro realiza múltiples funciones, desde cajero y almacenador de víveres hasta encargado de la limpieza, todo mientras entrena intensamente en el gimnasio para mantenerse en forma y seguir cosechando victorias. Su determinación proviene de una tradición familiar en el boxeo, ya que tanto su padre como su hermano mayor intentaron hacer carrera en este deporte.
“Mi padre fue boxeador profesional en Jalisco, ganó todas sus ocho peleas por knockout, pero no pudo seguir adelante por problemas económicos. Mi hermano, Cristian Navarro, también lo intentó, pero tampoco pudo continuar”, relata Ulysses. A pesar de estos obstáculos, su padre siempre lo animó a perseguir sus sueños en el boxeo.
Navarro reconoce que alcanzar la fama y la fortuna en este deporte es extremadamente difícil y que muchos jóvenes boxeadores se deslumbran con falsas ilusiones promovidas por la industria. “El boxeo es un deporte lleno de promesas vacías y corrupciones, especialmente para quienes recién comienzan. Es importante que los jóvenes entiendan la realidad y sepan que más del 50% de los que lo intentan no lo logran”, comenta.
Desde los 12 años, Navarro ha participado en torneos y campeonatos locales como amateur, aunque no tantos como le hubiera gustado debido a la pandemia de Covid-19. Debutó como profesional en diciembre de 2023 y, desde entonces, ha enfrentado el reto de mantener una carrera en un deporte que no siempre asegura estabilidad económica. Según un estudio del UCLA Latino Policy and Politics Institute, la mayoría de los boxeadores en California, como Navarro, ganan menos que el salario mínimo, lo que obliga a muchos a buscar otros trabajos para sobrevivir.
El joven boxeador sabe que su camino no será fácil, pero sigue adelante con la esperanza de lograr el éxito que su padre y su hermano no pudieron alcanzar. “Es difícil vivir solo del boxeo, pero el amor por este deporte es lo que me impulsa a seguir, a pesar de los desafíos”, afirma.
El Breaking se Estrena en los Juegos Olímpicos de París 2024