La b-girl australiana, Raygun, ha generado controversia en los Juegos Olímpicos de París 2024 al recibir una puntuación de cero por su actuación en la competencia de breaking. Su peculiar «baile del canguro» no solo ha quedado marcado en la historia olímpica, sino que también ha puesto en duda el futuro del breakdance como disciplina en los Juegos Olímpicos, especialmente con su exclusión confirmada para Los Ángeles 2028.
Raygun, cuyo nombre real es Rachael Gunn, una profesora universitaria de 36 años, logró llegar a París 2024 tras superar las eliminatorias locales en Australia. Sin embargo, su desempeño en el escenario más grande del deporte dejó mucho que desear, según críticos y especialistas. Aunque el juez principal de la competición, Martin Gilian, conocido en el mundo del breaking como MGbility, defendió la actuación de Raygun, destacando su originalidad y conexión con su entorno, la opinión pública no ha sido tan indulgente.
«La originalidad es el corazón del breaking, se trata de aportar algo nuevo y representar a tu país o región. Eso es exactamente lo que estaba haciendo Raygun. Se inspiró en su entorno, que en este caso, por ejemplo, era un canguro», comentó MGbility en una conferencia de prensa. Pese al respaldo de la comunidad del breaking y del hip-hop, las críticas en línea no han sido amables con la australiana. Su nivel de baile, preparación física y técnica fueron cuestionados, señalando que no estaban a la altura de las exigencias olímpicas.
La Federación Internacional de Breaking ha ofrecido apoyo psicológico a Raygun tras el aluvión de críticas recibidas en redes sociales. Aun así, la situación ha dejado una huella en la percepción del breakdance como disciplina olímpica, y su ausencia en Los Ángeles 2028 podría marcar el fin de su breve incursión en el olimpismo.
El Breaking se Estrena en los Juegos Olímpicos de París 2024