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Los Tigres de Detroit lograron este viernes su clasificación como comodín a los playoffs de la Liga Americana, poniendo fin a una sequía de una década sin postemporada. En contraste, los Medias Blancas de Chicago establecieron un récord indeseado, con su derrota número 121, la mayor cantidad en la era moderna de las Grandes Ligas desde 1900.

Con un marcador de 4-1, Detroit aseguró su victoria gracias a un doble productor de Riley Greene y dos carreras anotadas en lanzamientos descontrolados. Los Tigres han mostrado un resurgir impresionante al ganar seis partidos consecutivos y 10 de sus últimos 11 compromisos, asegurando su posición en la postemporada.

A partir de la próxima semana, Detroit se enfrentará al campeón de la División Oeste de la Americana, Houston o Baltimore, en una serie al mejor de tres juegos. El equipo ha sido liderado por una destacada actuación de su rotación de lanzadores, donde Tarik Skubal, uno de los favoritos para el trofeo Cy Young, ha sido pieza clave.

Chicago y su récord indeseable

Por otro lado, los Medias Blancas de Chicago pasaron a la historia al romper el récord de 120 derrotas en una temporada, una marca previamente establecida por los Mets de Nueva York en 1962. El equipo de Chicago ha tenido una temporada para el olvido, y aunque lograron evitar la marca con una barrida frente a los Angelinos, finalmente no pudieron escapar del triste récord ante los Tigres.

Boxscore
Los Tigres contaron con una sólida actuación de Brenan Hanifee, quien mantuvo en blanco a los Medias Blancas durante dos entradas, y Brant Hurter (6-1), que permitió solo una anotación en cuatro entradas. El abridor de Chicago, Jared Shuster (2-5), cargó con la derrota al permitir las dos carreras decisivas en el quinto inning.

Caleb Williams, el Nuevo Capitán y Quarterback Titular de los Chicago Bears

 

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