Cinco expedicionarios mayores de 65 años se preparan para desafiar los Andes en el Desafío Santa Lucía Seniors

En un viaje lleno de pasión y determinación, cinco deportistas mayores de 65 años, Leticia Herrería (65), Pepe García (67), Pilar Utrilla (67), José Antonio Fernández (70) y Álvaro Vallés (69), han llegado a Perú con un objetivo ambicioso: conquistar el volcán Vallunaraju, una de las cumbres más impresionantes de la Cordillera Blanca. Este desafío, parte del evento Desafío Santa Lucía Seniors, pone a prueba la resistencia física y mental de estos veteranos aventureros.

Un reto para la mente y el cuerpo

El Desafío Santa Lucía Seniors es una competencia sin precedentes que busca destacar el valor, la determinación y la capacidad de las personas mayores de 65 años para enfrentar pruebas extremas. Durante la expedición, los aventureros escalarán diversas cumbres, incluyendo el Lago 69 (4.600 metros) y el Yanayacu (4.850 metros), como parte de su proceso de aclimatación antes de intentar el ascenso final al Vallunaraju, que se eleva a 5.686 metros sobre el nivel del mar.

«Lo que más nos preocupa es la altitud y la falta de oxígeno. Nunca hemos experimentado algo así», mencionan en conjunto los participantes. Estos deportistas, acostumbrados a desafíos locales, ahora se enfrentarán a uno de los picos más emblemáticos de los Andes peruanos, en una expedición que pondrá a prueba tanto su físico como su resistencia mental. El desafío consiste en superar el mal de altura, el agotamiento y las duras condiciones climáticas.

El camino hacia la cima: un entrenamiento exhaustivo

Para asegurar que los cinco expedicionarios estén listos para la exigencia física del Desafío, el equipo ha estado entrenando bajo la supervisión del doctor Carlos Martínez, experto en medicina de alta montaña y director deportivo de la expedición. Martínez, quien ha acompañado al famoso alpinista Carlos Soria en sus aventuras por los ochomiles del Himalaya, ha diseñado un plan riguroso que incluye ejercicios de resistencia, aclimatación y técnicas de escalada.

«Hemos entrenado mucho para este desafío, pero la altitud es algo que no hemos podido replicar en nuestros entrenamientos en casa», menciona Pilar Utrilla. «Es lo único que nos tiene nerviosos».

El valor de los seniors en el deporte

Este desafío no solo busca alcanzar una cumbre física, sino también derribar barreras sociales. En un mundo donde el deporte se asocia mayormente con la juventud, el Desafío Santa Lucía Seniors pretende mostrar que las personas mayores de 65 años tienen mucho que aportar al mundo del deporte y la aventura. «Queremos inspirar a más personas de nuestra edad a seguir activos, a no rendirse ante la idea de que, por ser mayores, no pueden seguir desafiando sus límites», comenta Álvaro Vallés.

El deporte, para ellos, es mucho más que un pasatiempo; es una forma de vida. «Con la jubilación no se acaba nada, al contrario, es el inicio de muchas aventuras», asegura Pepe García, quien, a sus 67 años, es uno de los pilares del equipo.

Inspiración para futuras generaciones

El mensaje del Desafío Santa Lucía Seniors es claro: no hay límites de edad para alcanzar nuevos horizontes. A través de esta expedición, Leticia, Pepe, Pilar, José Antonio y Álvaro buscan ser un ejemplo para las futuras generaciones, demostrando que la vida activa no tiene por qué terminar con la jubilación.

«El peor error que puedes cometer es dejar de moverte», añade José Antonio Fernández. «El deporte nos ha dado amigos, salud y una nueva motivación para seguir adelante».

El equipo parte con ilusión y con la esperanza de conquistar el Vallunaraju. Sus logros no solo quedarán registrados en la historia del deporte senior, sino que también servirán como inspiración para miles de personas alrededor del mundo.